Saturday, October 22, 2011

Amargura en París

Asomo la mirada hacia al balcón, mientras mis pies tocan la alfombra de nieve que ha caído en la ciudad y observo su horizonte,
la cúpula de la iglesia Nevada y las puntas de aquel rascacielos construido un par de años atrás que no se puede ver.
El aroma de esos granos tostados me dicen que es hora de saciar mis papilas gustativas y me invitan a rozar el sabor del delicioso café.
Una linda mañana de invierno en parís me dice que estas vacaciones son lo mejor que me ha pasado en la vida, sin preocupaciones y sin ningún tipo de responsabilidad alguna que me pueda generar algún tipo de malestar.

Cierro la ventana de mi balcón y miro hacia el adentro de mi alcoba, a la vez que observo esa silueta perfecta a la que llamo mi mujer mientras las sabanas apenas si reflejan su ligera y suave figura, su pálida y final piel y sus cabellos dorados. Permanezco inmóvil, quieto, observando las curvas de sus caderas mientras un sentimiento de satisfacción recorre mi ser y sé que estoy completo.

Recorro la cocina como si automáticamente mi cuerpo se moviera por sí solo y realizara todas las acciones que mi cerebro le indica sin yo tener alguna opinión al respecto, y alcanzo la alacena izquierda mientras obtengo una de las tantas coloridas tazas con el nombre Paris en diferentes tipos de letra.

Le doy un sorbete a aquella taza y la sensación me llena de una calidez como ninguna otra, reviso el periódico local y confirmo horarios del multicinema más cercano y me empezó a vestir, recojo mi cartera y me aproximo al multicinema mas cercano.

Imagino en mi cabeza lo que sería una sorpresa para mi bella dama y le indique al vendedor de taquilla que me de 2 boletos para la función, me da mi cambio y sigo caminando por la cera y diviso una florería, compró un ramo de flores y me comunico desde mi móvil al hotel para ver si Giselle todavía se encuentra ahí, y me dice el recepcionista que no contestan.

Pensando que tal vez sigue dormida paso a comprar unos artículos de pintura y acrílicos y lienzo en marco, vuelvo a intentar marcar a recepción del hotel y me indican que siguen sin contestar,
Estando a 10 cuadras del hotel me dedico a caminar y regresar a paso apresurado, 5 cuadras después de mi largo recorrido al fondo de la calle parece que hay un accidente, camino apresuradamente con un poco de temor y miedo y mi respiración se ve más agitado.

Al final de la calle veo que los paramédicos han llegado y están asistiendo mientras la multitud rodea el accidente, mi curiosidad se activa y me acerco con morbo y nerviosismo.

Mi cuerpo se paraliza, no lo puedo creer, me siento débil y mis brazos dejan caer todo o que poseía mientras empujando a la multitud pido el paso hacia el medio del accidente, con lagrimas en los ojos y un grito de desesperación veo que el cuerpo de mi ama cubierto en sangre permanece inmóvil, me incoo y la abrazo mientras los paramédicos me ponen resistencia y me piden que me retire de la escena, les grito y exijo que me dejen mientras pronuncio su nombre una vez tras otra, Sus ojos se entre abren y apenas si escucho el murmuro entrecortado de algunas palabras, aun estando en medio de todo no concibo todo lo que me está sucediendo, me ve fijamente a los ojos y me indican una ternura inigualable le pido que resista mientras los paramédicos me dicen que no hay nada que puedan hacer, pronuncia mi nombre suavemente y me dice que me ama y que siga adelante, que era lo mejor que la había pasado y que no lamenta nada de lo nuestro, me repite 3 veces te amo y cierra los ojos, lloro desconsolado al lado de amada mientras la abrazo profundamente por lo que parecen horas , unos de los paramédicos me pone la mano en el hombro y me dice que es hora de partir.

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